La misión
“Estas Iglesias miran al presente – afirma el director de la Oficina de Comunicación de la CEI, Vincenzo Corrado. Un presente que está hecho de dificultades pero también de tanta esperanza”. Y están precisamente estas dos dimensiones en el centro de la misión de los obispos de Bari, unos sesenta, cuya llegada está prevista para hoy. Mientras tanto, en la ciudad se respira un aire de gran expectativa.
El clima
Un sentimiento que en estas horas se refleja en el bullir de la gente que se detiene a observar las actividades de preparación del evento. Pero no solo. “La expectativa más grande – precisa Corrado – es sobre todo por lo que dirá el Papa en la conclusión de estas tres jornadas intensas para alentar a los obispos a continuar en el camino de construcción de un escenario de paz”.
Los números
El domingo, para escuchar las palabras del Papa estarán presentes miles de fieles, unos 500 entre sacerdotes y diáconos y 600 religiosos y religiosas. Para el evento se movilizarán 500 voluntarios y participarán 400 agentes de la comunicación. “Son números importantes – concluye Corrado – para una tierra como esta acostumbrada a la acogida y también a hacer sentir el afecto”.