Lo indicó la Oficina de prensa de la Santa sede, precisando que los huéspedes fueron invitados esta misma mañana, entre quienes se encontraban en los alrededores de la basílica de San Pedro o en las duchas de la columnata: cuatro italianos, un moldavo, dos rumanos y un peruano.
El Papa saludó individualmente con afecto a quienes por su parte le regalaron tres ramos de girasoles, que Francisco hizo poner en la capilla de la Residencia Santa Marta. Además les invitó personalmente a desayunar con él en el comedor de la residencia.
La Oficina de prensa precisó también que hoy en muchos comedores de Roma dedicados a las personas en dificultad, al concluir el almuerzo o la cena, se ofrece un dulce en nombre del Santo Padre. Y los residentes en los dormitorios además reciben un sobre con una estampita y un pequeño don.
